domingo, 21 de febrero de 2010

El púlpito de Giovani Pisano: describe los elementos del mismo.


El púlpito de la Catedral, obra maestra de Giovanni Pisano, sobrevivió al incendio pero fue desmontado durante los trabajos de restauración y no fue repuesto hasta 1926. Con su estructura arquitectónica y la compleja decoración escultórea, la obra es una de las más vastas narraciones por imágenes del siglo XIV que refleja la renovación y el fervor religioso de la época. En las placas, ligeramente curvas, se han esculpido con un lenguaje expresivo los episodios de la Vida de Cristo. La estructura poligonal y por primera vez los paneles están ligeramente curvados, dando una idea de circularidad nueva en su género. Igualmente originales son

* La presencia de cariátides, figuras esculpidas en el lugar de simples columnas, que simbolizan las Virtudes.
* La adopción de ménsulas en lugar de arcos para sostener el piso alzado.
* El extraordinario sentido del movimiento, dado por las numerosas figuras que llenan cada espacio vacío.

Por estas cualidades unidas a la técnica narrativa de las nueve escenas es considerado como la obra maestra de Giovanni y de toda la escultura gótica italiana.

El púlpito solicitado a Giovanni sustituyó a otro realizado por Guglielmo (1157-1162), que fue enviado a la Catedral de Cagliari.

Dado que no había documentación de cómo era el púlpito antes de ser desmantelado, fue reconstruido en una posición distinta de la original.


Giovanni Pisano (1250-1314) fue un escultor italiano, pintor y arquitecto. Hijo del famoso escultor Nicola Pisano, quién recibió su formación en el taller de su padre.
En 1265-1268 trabajó con su padre en el púlpito de la catedral de Siena. Luego trabajaron juntos en la fuente Fontana Maggiora en Perugia. Estas primeras obras se hicieron siguiendo el estilo de su padre. Sin embargo la Virgen con Niño puede atribuirse con certeza a Giovanni. Su siguiente obra fue en Pisa, esculpiendo las estatuas en las dos filas de gabletes con tracerías en el exterior del Baptisterio (1277-1284) se notaba que estaba dejando atrás el sereno estilo de su padre.
Su obra entre 1302 y 1310 en el nuevo púlpito para la Catedral de Pisa muestra su distintiva preferencia por el movimiento en sus personajes, alejándose aún más del estilo de su padre. Muestra nueve escenas del Nuevo Testamento, grabado en mármol blanco. Este púlpito con sus dramáticas escenas se ha convertido en su obra maestra. Después del incendio de 1595 fue empaquetado para guardar durante la redecoración y no fue redescubierto y erigido de nuevo hasta 1926.

No hay comentarios:

Publicar un comentario